Los hombres somos prisioneros de nuestros propios
complejos…
Los
complejos dicen: Todo está claro,
fuerza
y orgullo… No admitimos cambio alguno.
El
corazón dice: ¡Exageración!
La
suavidad puede ser un medio
para
rendir dulce a la vida.
Los
complejos dicen: Intentas engañarnos,
poseemos
toneladas de saber,
no
podemos equivocarnos.
El
corazón dice: la dulzura no se pesa,
pero
se siente, creedme.
Los
complejos dicen: ¿Negarse a la herencia?
No
puede ser, es nuestra existencia.
El
corazón dice: En vuestro desierto de herencias
os
perdéis; vuestra opinión no es la mía.
Los
complejos añaden: El alto y el bajo
nunca
se encuentran.
El
corazón: debéis abrir más los ojos,
hay
creencias que se derrumban.
Mohammed Korchi.
Rabat, 28 de octubre del 2014.
Ejercicio realizado a partir de “Dice la razón…
-PARABOLAS-” de Antonio Machado.
Poema hermoso y con un profundo filosófico....
ResponderEliminary esto no es extraño para ti Mohamed ...!
Touria
Eligió dos contrastes que no tienen oportunidad ni un punto de intersección aunque emanan de la misma fuente : el individuo. Me gusta mucho la forma que has revelado tu preferencia y la superioridad del sentimientos saludables comparado a los complejos que son elementos negativos.
ResponderEliminarPienso que hay en ti un lado sentimental respetable.
Bahia
En la confrontación que elegiste en “LOS COMPLEJOS DICEN…”, tu texto hace que sea una reflexión filosófica muy interesante.
ResponderEliminarEl hecho de oponer los complejos al corazón es muy original y sorprendente a la vez porque no se puede negar el lado “oscuro/negativo” de la palabra “complejos” y la nobleza del corazón como órgano-motor de vida.
Me gusta cuando dices:” La suavidad puede ser un medio
para rendir dulce a la vida.”
¡Felicidades Mohammed!
Rkia