Sigo derrochando mis recuerdos
en el Mercado del Olvido.
Los llevo en mí,
ligeros o pesados.
Los voy dejando caer,
salvo algunos,
a lo largo del camino.
MEMORIA HERIDA
Hay recuerdos que nos duelen,
que nos hacen revivir
con regusto amargo
momentos de soledad
de dolor y sufrimiento,
de separación y de duelo.
¡Heridas de la memoria!
Sin embargo,
hay otros que nos calman
nos relajan, nos animan
a seguir adelante,
a confiar en el futuro,
a sentirnos ligeros, ebrios,
a ver la vida
de cuantiosos colores:
verde, azul, amarillo…
en cualquier sitio
y bajo cualquier cielo.
MEMORIA VIVA
Nos hace falta memoria
para los recuerdos esenciales
alegres o dolorosos de la vida
que viajan hacia el olvido.
Nos hace falta memoria
para recordar pedazos de vida
con instantes de buena suerte
y otros de peor fortuna.
Nos hace falta tanta memoria
para evocar la infancia,
la intensa adolescencia
y todo aquel pasado
más o menos lejano
de seres queridos
vivos o muertos
que un día formaron
parte de nuestras vidas.
Rkia Okmenni
Rabat, 17 de noviembre de 2009
Rkia:
ResponderEliminarMuy poético lo que escribes. Mucha verdad referente a los recuerdos. Y gracias por aquellos que más adelante "vas dejando caer a lo largo del camino".
Ana Borges
me encantan tu poemas, con la sensibilidad que te caracteriza, y la dulcura tambien propia de ti,
ResponderEliminarmuy bonitos